domingo, 29 de junio de 2014

Lealtades y Justicia en la familia

Lealtades y Justicia en la familia
Los padres comieron uvas agrias, pero es la boca de sus hijos la que se frunce por el sabor. Ezequiel, 18:2


Ivan Böszörményi-Nagy considera que se deben tener en cuenta la justicia y la equidad en el seno de la familia. Propone la restitución de una ética de las relaciones transgeneracionales.

Uno de los conceptos que desarrolla Nagy es el de lealtad al que le da una gran importancia en la comprensión de las relaciones familiares.

Dice que puede definirse en términos morales, filosóficos, políticos y psicológicos.

El significado tradicional de lealtad es la actitud confiable y positiva de los individuos hacia un “objeto de lealtad”, pero si nos referimos a una trama de lealtad multipersonal debemos tener en cuenta las expectativas estructuradas de un grupo por las cuales los miembros del mismo asumen un compromiso.

Para ser miembro leal de un grupo hay que interiorizar el espíritu de sus expectativas y asumir actitudes que obedezcan esos mandatos interiorizados.

Es una obligación ética que si no se puede cumplir genera un sentimiento de culpa que actúa regulando el sistema.

La homeostasis del sistema de obligaciones depende de un insumo regulador de culpas.
La trama de las lealtades familiares se relaciona con alineaciones, escisiones, alianzas y formación de subgrupos.

Los compromisos de lealtad son como fibras invisibles pero resistentes que mantienen unidos fragmentos complejos de” conducta” relacional, tanto en familias como en la sociedad en su conjunto.

Es importante conocer quiénes están unidos por vínculos de lealtad en un grupo y qué significa la lealtad para ellos para entender cómo funciona ese grupo.

El compromiso de lealtad tiene como fin la supervivencia del grupo.

Nagy cita el caso de dos hermanas que llevaban al extremo sus celos y rivalidades por lealtad a sus padres, ya que con sus conductas enmascaraban su fracaso matrimonial.

Es fundamental comprender cómo funcionan las lealtades en un grupo familiar para poder entender su estructura.

La palabra lealtad deriva de la voz francesa “loi” que significa ley.

Las familias tienen sus leyes no escritas, son expectativas compartidas y todos sus miembros se hallan sujetos a ellas, los niños son sancionados cuando no las cumplen y en los adultos se hallan internalizadas.

Algunos miembros de la familia se sacrifican para honrar cadenas multigeneracionales de obligación y endeudamiento existencial.

En todas las generaciones los compromisos de lealtad vertical-a una generación anterior o posterior- entran en conflicto con los de lealtad horizontal.

Un ejemplo clásico de lealtades no resuelto es Romeo y Julieta.

Del concepto de lealtad se desprende el de justicia familiar.

Hay un “libro mayor” en el que se registran las obligaciones de los miembros de la familia
La foja de un miembro de la familia ya está llena antes de que comience a actuar.

La estructura de expectativas conforma la trama de lealtades y, junto con las cuentas relativas a los actos cometidos, el libro mayor de la justicia.

Hay un balance multigeneracional de justicia e injusticia que motiva conductas relacionales e individuales.

Otro concepto central de Nagy es el de parentalización que hace referencia a cuando los hijos se convierten en padres de sus padres.

Es una distorsión de la relación.


Es una mala conceptualización de las deudas, saldamos las deudas transgeneracionalmente, lo que recibimos de nuestros padres se lo damos a nuestros hijos.

Un ejemplo bastante común es el de la hija mayor que asume el rol de la madre, no pudiendo vivir su vida.

viernes, 13 de junio de 2014

Secretos y fantasmas


Lo que se calla en la primera generación, la segunda lo lleva en el cuerpo. F. Dolto


Casi todas las familias tienen secretos sobre cuestiones consideradas vergonzosas cuando ocurrieron. Si no se los devela son tóxicos.

Hay cuatro categorías de secretos:

1) Sexuales
2) De muerte y enfermedades
3) De filiación
4) Delitos

Nicolàs Abraham y Marìa Toorok desarrollaron la noción de cripta y su fantasma a partir de investigaciones clínicas.

Abraham dice que los Fantasmas no son los difuntos que vienen a molestar, sino los vacíos dejados en nosotros por los secretos de los demás. (1975)
Lo que en una generación se constituye en cripta, se volverá fantasma por el bies de las transmisiones inconscientes en la generación siguiente.

El fantasma es una formación del Inconsciente que tiene la particularidad de no haber sido jamás conciente. Resulta del paso del Inconsciente de uno de los padres al Inconsciente de un hijo

Esto sucede cuando ha habido algún acontecimiento del cual no se habla, generalmente porque se siente vergüenza, puede ser una muerte difícil de
aceptar, un asesinato, una enfermedad, una internación psiquiátrica, un adulterio, un abuso, una quiebra financiera, un encarcelamiento, etc.

Es un secreto inconfesable que se instala en una cripta pero se transmite del inconsciente de un padre al inconsciente de un hijo, de una generación a otra.

El trabajo transgeneracional ayuda a identificar esa cripta y liberarse nombrando al fantasma.

lunes, 9 de junio de 2014

Repeticiones

                          Yo no invento, sólo miro por detrás de lo que ya existe. J. Saramago


                                              Imagen: Leonora Carrington
 


Un tema que aparece muy visible en la mayoría de los genogramas es el de las repeticiones.
La primera que las estudió fue Josephine Hilgard, médica y psicoanalista estadounidense.
Las denominó síndrome de aniversario.

A partir de un estudio que realizó en 1961 pudo demostrar que los brotes psicóticos ocurren en fecha traumáticas para la familia.
Es bastante común también que nacimientos, casamientos, enfermedades y muertes ocurran en una fecha importante para la familia.
El inconsciente tiene buena memoria y marca los acontecimientos importantes del ciclo de vida repitiendo fechas o edades.

También es común que los hijos de reemplazo nazcan el día del aniversario, muerte o entierro de su predecesor.
Llamamos hijos de reemplazo a aquellos que nacen después de un duelo no realizado, hay que diferenciarlos de los hijos reparadores, que son siempre muy bien recibidos.
Los hijos de reemplazo sufren despersonalización, invitados a vivir con una identidad prestada.

Estas repeticiones permiten el contacto con aspectos reprimidos, negados u olvidados relacionados con hechos traumáticos. Su aparición y reconocimiento posibilitan encontrar una respuesta y reparación.

domingo, 1 de junio de 2014

El nombre

Los nombres convierten a los niños en resucitados, Freud, La interpretación de los sueños.

  
El nombre es una de las bases de nuestra identidad, es el primer regalo que nos dan al nacer y nos hace existir independientemente de nuestra madre.

Nosotros tenemos el mismo nombre a lo largo de toda la vida, pero no es así en todas las culturas. Algunos indios norteamericanos cambian su nombre en las diferentes etapas de su ciclo vital, se asocia con sus logros y actitudes.


Es importante saber quien decidió nuestro nombre y sus razones.


Está frecuentemente asociado con fantasías narcisistas y proyecciones de nuestros padres.
Muchas veces el nombre se elige por repetición del que tiene otro miembro de la familia, vivo o muerto.


A veces se relaciona con un secreto sexual de alguno de nuestros padres que nos nombran como un antiguo novio/a o amante. En estos casos se puede hablar de un lazo incestuoso.


Otras veces nuestros nombres responden a la moda social, cultural o religiosa del momento. Así podemos llevar el nombre de un actor/actriz famoso/a, una figura política, un/a deportista, un santo, etc.